Meditación para Fortalecer tu Mente

Cuando necesites respuesta a tus preguntas, medita y ora. 

Cuando necesites solucionar un problema, medita y ora.

Cuando te sientas agobiado, apagado, deprimido, ansioso, medita y ora.

Cuando quieras sentir una conexión con Dios o tu ser supremo, medita y ora.

Cuando estés en una situación muy difícil y necesites fuerzas, medita y ora.

Paramahansa Yogananda, un monje hindú que ha aportado a la espiritualidad y la unión de todas las religiones como las rutas a la búsqueda de Dios, dice que meditar y orar te provee dicha, consciencia plena de tu existencia y una realización profunda de la omnipresencia de Dios en ti. La fuente interna de vida es el prana o energía vital que conecta el sistema nervioso para activar las áreas de relajación, conciencia y contemplación. Además, esta energía fluye a todas las partes de tu cuerpo para que puedas funcionar de manera óptima.

¿Cómo funciona la meditación?

Nuestra mente es poderosa, podemos ir a donde queramos y sentirnos como nos gusta con la meditación. He conocido personas que dicen que no pueden meditar porque se les hace difícil dejar la mente en blanco. Pero, ¿quién dijo que había que obviar nuestros pensamientos y sensaciones cuando meditamos? Cuando estamos en este estado de relajación desarrollas la conciencia de ti mismo y aprendes a aceptar lo que está pasando en el momento presente sin juzgar.

Durante la experiencia de meditación, te sientes calmado, alerta, enfocado, feliz, lleno de paz, amor y compasión. Es una sensación placentera que quieres continuar haciendo, porque en ese momento dejas ir tus cargas y entras a un estado más amplio de la conciencia lo que te ayuda a transferir esas sensaciones y actitudes a todas las interacciones contigo y con los demás. Te das cuenta que cuando meditas, todas las preocupaciones, molestias, dolor, problemas y negatividad desaparecen. También sientes que puedes manejar el estrés más fácilmente y te llenas de una energía poderosa.

Beneficios de la Meditación Mindfulness

Jon Kabat-Zinn, maestro de meditación y el padre del mindfulness moderno, define esta meditación como prestar atención deliberada y sin juicio al momento presente. Kabat-Zinn indica que la práctica de mindfulness ayuda a balancear nuestra energía, la salud mental y física para que trabajen en armonía. Además, provee energía para reemplazar las respuestas defensivas para relacionarnos con confianza, disminuye los pensamientos y emociones negativos y provee claridad para lidiar con las demandas de nuestra vida diaria. 

A nivel fisiológico, la meditación cambia la actividad de las ondas cerebrales, aumenta la actividad parasimpática que es la relajación del sistema nervioso, cambia el ritmo cardíaco, cambia los niveles de los neurotransmisores, aumenta la serotonina, la melatonina y disminuye los niveles de cortisol que es la hormona del estrés. Además, disminuye la presión arterial, el dolor, la frecuencia e intensidad de los ataques de asma y migraña, mejora el estado de ánimo y disminuye la ansiedad. En fin, es lo que necesitas para llegar a la quietud y sentirte en bienestar y balance.

Meditación de Conciencia Plena

Para este ejercicio de meditación, encuentra un lugar cómodo y tranquilo. Puedes sentarte en una silla o en el suelo, con la cabeza y la espalda rectos. Trata de estar de 3 a 5 minutos realizando este ejercicio.

• Cierra los ojos para eliminar cualquier distracción o estímulo externo y enfocarte en tu interior.

• Toma conciencia de tu respiración, enfocándote en la sensación del aire entrando y saliendo de tu cuerpo. Siente el abdomen subir y bajar, y el aire entrar por las fosas nasales y salir por la boca. Presta atención a la forma en que cada respiración cambia y es diferente.

• Deja de lado todos los pensamientos del pasado y futuro y permanece en el presente, observando tu interior y sintiendo tu cuerpo.

• Observa cada pensamiento que va y viene, ya sea una preocupación, miedo, ansiedad, bienestar, alegría o esperanza. Cuando surjan pensamientos en tu mente, no los ignores ni los suprimas, solo observalos, mantén la calma y usa la respiración, una palabra o mantra como ancla, como por ejemplo: estoy en paz...

• Si te encuentras dejándote llevar por tus pensamientos, observa hacia dónde se va tu mente, sin juzgar, y simplemente regresa a tu respiración, tu palabra o tu mantra. Recuerda no ser duro contigo mismo si tu mente se aleja. Lo importante es estar consciente de esto y regresa a tu interior.
• A medida que el tiempo llega a su fin, comienza a regresar lentamente al momento presente, al aquí y al ahora, al ahora y al aquí, estando consciente de dónde te encuentras y cuando estés listo, puedes abrir los ojos en cualquier momento.

Conclusión

La meditación es una práctica maravillosa que puede fortalecer tu mente y tu bienestar en general. Si todavía no has probado la meditación, te animo a que lo hagas. Incluso unos pocos minutos al día pueden tener un gran impacto en tu vida. Y si ya meditas, ¡sigue adelante! Empieza ahora, y estarás en camino de tener una mente fuerte y estable que te ayudará a enfrentar cualquier desafío que se presente en tu vida.

Te deseo salud y bienestar siempre...

La luz en ti reconoce la luz en mi.... ¡Namaste!

Referencias

Kabat-Zinn, J. (2012). Mindfulness for Beginners, Reclaiming the Present Moment and Your Life. Boulder, CO: Sounds True.

Yogananda, P. (1991). Autobiografía de un Yogui. Los Angéles, CA: Self-Realization Fellowship.